Niños Mutantes presenta «Náufragos» en la Sala Costello de Madrid
Fotos: María Vila
Ahondando un poco más en el misterio, el pasado jueves tuvo lugar en la Sala Costello de Madrid la presentación del que será el octavo larga duración de Niños Mutantes: “Náufragos”. Allí nos acercamos para disfrutar de un pequeño concierto aderezado con empanada y con el buen humor de los músicos, que depositaron en su vocalista Juan Alberto Martínez la responsabilidad de ir comentando el nuevo material a los asistentes.
El show comenzó con el tema que da título al álbum, una pegadiza canción que ya había sido presentada como adelanto a principios de enero y que certifica el progresivo ablandamiento del sonido del grupo desde los tiempos de sus primeros discos, mucho más agresivos y guitarreros. Y es que, pese al título de su último trabajo, los cuatro Niños Mutantes parecen tener muy claro cuál es el rumbo a seguir en su travesía musical. “Náufragos” continúa la senda del pop inmediato y sin dobleces de su predecesor, “Las noches de insomnio”, y difícilmente decepcionará a quienes hayan seguido de cerca su trayectoria hasta la fecha.
Volviendo al recital, la segunda parada en la presentación del disco nos ofreció la interpretación de “La puerta”, el tema que abrirá el LP: una tonada de reminiscencias folk acerca de un empleado incapaz de soportar la necedad de su jefe ni un día más. A continuación Juan Alberto introdujo la balada “El infierno” explicando que su inspiración provenía de una mala experiencia personal de uno de los integrantes de la banda (sin aclarar a cuál de los cuatro se estaba refiriendo). Su letra, un poema vengativo cargado de rencor, contiene algunas de las mejores frases que escucharemos en “Náufragos”. Le siguió “Empezar de cero”, imprimiendo nuevamente ritmo al concierto con un estribillo en las antípodas de la canción anterior: una declaración de amor tan enérgica como contagiosa. “Querer sin querer”, con una instrumentación apoyada en sintetizadores que según Juan Alberto hizo flipar a Banin de “Los Planetas”, tomó entonces el relevo reflexionando sobre la naturaleza fugaz y caprichosa del amor.
Fue justo a continuación cuando el cantante y letrista del grupo hizo la presentación de “El miedo”, mi inmediata favorita del nuevo disco, parafraseando a alguien que un día le dijo que “hacerse mayor es tener miedo a caerse”. La canción, un rock de aires fronterizos adornado en la versión de estudio con unas elegantes trompetas, puede ser entendida tanto como una predicción funesta (“todo pasará sin que tú decidas nada”) como un acicate en la lucha contra los propios temores. El concierto terminó con la interpretación del tema más desenfadado de “Náufragos”, “Hundir la flota”, inevitable single que apuesta plenamente por el buen rollo y cuyos uo-oh-oh’s serán perfectos para hacer cantar al público en el directo.
Más allá de estos siete temas, el nuevo LP aún guarda unas cuantas sorpresas que los granadinos prefirieron mantener veladas. Nosotros, sin embargo, no podemos resistir la tentación de ofreceros algunos adelantos:
Pese a lo esquemático de su lírica, “Dame tu mano” posee probablemente las guitarras más elegantes del disco. “Volverás”, construida sobre una recurrente melodía de teclado, supone uno de los momentos más amables de “Náufragos”. Una luminosidad que contrasta con la atmósfera más densa y opresiva de “Muerte de un ampli”, en la que la banda inesperadamente se arrima a la onda de los coruñeses Triángulo de Amor Bizarro (rebajando sustancialmente el componente noise, eso sí). Inmediatamente antes sonará “El pozo (mejor morir de sed que ir a lo fácil nº12)”, otro de los highlights del disco, que comienza como una clásica pieza de cantautor para acabar evolucionando hacia un rock más complejo y atmosférico, próximo en intenciones a los Radiohead de “OK Computer”. La nota más baja del conjunto la pone “Caerán los bancos”, donde una letra excesivamente naïf y coyuntural sobre la actual crisis económica devalúa otra rutilante melodía pop. No obstante, la sensación general que transmite “Náufragos” es la de una oportunidad inmejorable para que Niños Mutantes reivindique con fuerza el lugar que llevan años ganándose en el panorama musical patrio.
Ellos han hecho bien su trabajo. Ahora sólo resta descubrir cómo lo recibe el público. Será, si todo marcha según lo planeado, el próximo mes de marzo.
Náufragos:
01. La puerta
02. Hundir la flota
03. El miedo
04. Náufragos
05. El infierno
06. Caerán los bancos
07. Empezar de cero
08. Querer sin querer
09. Dame tu mano
10. Volverás
11. El pozo (Mejor morir de sed que ir a lo fácil nº12)
12. Muerte de un ampli
Hola!
Me mola tu blog, he visto varias actualizaciones y tienes buenos gustos musicales, te sigo.
un saludo!
Gracias y bienvenido!
Hola otra vez desde Murcia…..vuelvo a darte las gracias (y esta vez mas encarecidamente) por descubrirme a este pedazo de grupo! No soy una fanatica de la musica española, pero a la primera escucha me han encantado! Lo dicho, gracias!Intentaré verlos en la nueva gira.
Ps: No soy de la organización 😉 pero el cartel del SOS 48 este año está bien surtido….lo has visto? Pulp, Gossip, Friendly Fires, Flaming Lips, Magnetic Fields…solo te informo y te lo recomiendo.
Un saludo y, "te sigo siguiendo"
Hola anónimo/a
Tienes razón, el SOS 4.8 tiene un gran cartel (creo que ya lo tenía en 2011). A Friendly Fires y a Pulp los vi el año pasado y tienen un directo genial. Si no he hablado del festival es porque son tantos los que hay en la península, que no doy a basto, por eso me centro en los de mi zona más próxima (Galicia y Portugal). Pero trataré de hablar de él en breve, lo prometo.
Un saludo y gracias
PD: Por cierto, que el autor de esta reseña no soy yo, es Jero. Manifiéstate, autor!!
Vaya, con eso de que los comentarios de esta reseña no me llegan a mi correo (como sí lo hacen los de mi blog) ni me había percatado de que se había generado ambientillo por aquí. Muchas gracias a los comentaristas por sus palabras 😉